lunes, 23 de diciembre de 2019

Lost in translation.

ya no se puede aflojar, de hecho ni debo: estrellarme y declararme siniestro duele menos que frenar y salvar los muebles

dust to dust, ashes to ashes; que se apaguen todos los faros, que a mí, desde hace tiempo, me guían los relámpagos

ahí fuera llueve y me pongo a pensar que soy menos libre que nunca, que si me viera Sartre escupiría sobre mis zapatos y sobre las páginas que llevo ensuciando estos años

hace tiempo que mis sueños se han reducido a que nadie me ayude a conciliarlo

que se borren todos mis pasos si no consigo que se borren también los pisotones en almas ajenas (la única vida que he destrozado, créeme, ha sido la mía) 

muchas veces he jugado a que el tiempo era algo por lo que no teníamos que pasar, ahora entiendo por qué me pasa por encima

los tulipanes siguen subiendo de precio, pero no veo nada entre tantas flores; que me abrace un perfume y después olvidarlo es la mejor forma de morir hasta que nadie me demuestre lo contrario

un cuento de Poe en el que el culpable es cómplice y el inocente es asesino

una noche sin luna y, para no variar, dos botellas de vino

sábado, 2 de noviembre de 2019

Tengo cara de que vuelo.

te vuelvo a ver rubita mía
que yo soy tan tuyo
y tú que no quieres saber na
de mi vía

que yo ahora pongo cara
de cantar por alegría
pero en mi alma ay cielo
compás de bulería

y yo te lo dije tanto
que me buscaba la ruina
que no sé lo que hacía
y hay nubes aunque no llanto

que no
que nunca te olvidaría
me negué a dejar de verte
y ahora mira

tengo cara de que vuelo
tengo pa decir mentiras
pero si lo cuento lo que quiero
es amanecerte el día

desde mi roca sentao
espero una salía
espero que todo esto amaine
y que sea to
lo que me pasó un día

y no seguir siendo
este abandonao

viernes, 6 de septiembre de 2019

Nota de su...

y hoy escribo con sangre
lo que nunca he sido
y si lo soy
ojalá me mate
con los mismos cojones
que nunca he tenido

y estoy tranquilo hasta
que apareces y me
dices a la cara que nunca
te he querido

espero que mañana
me parta un puto rayo
que no cesa
que me parta
si esto no ha sucedido

me quiero morir
poquito a poquito

me quiero morir
como quien sabe quién eres
y nunca te ha conocido

jueves, 4 de julio de 2019

Adesso che sei lontana

un avión a Italia, era 14 de septiembre y no me hacía a la idea

una fiesta con desconocidos, el temido pero ansiado primer contacto

volver a maravillarme delante del Coliseo y del Vittoriano; mucho calor, fotos y caras nuevas, ninguno terminaba de creerlo hasta que una calle estrecha nos llevó a la Fontana

un arco con las luces tricolores: esto ya había empezado

el Vaticano, el Trastevere, enamorarme de los techos dorados de Santa María, carbonara y cacio e pepe; el Gianicolo y el cielo rosa sobre Catania; ahí pensé que siempre reinarías

maldito seas Akab; Javi sacó un cuadernillo que solía llevar en la puerta y se puso a escribir sus versos, no pude evitar sonreír y capturar ese momento

un paseo por Villa Borghese y anochecer en el Pincio con vosotros; el Tevere reflejando cada rayito de sol que se atrevía a atravesarlo

Marino nos dejó los labios rojos y un dolor de cabeza del que nadie consiguió escapar, pero qué bien, joder

un tren a Nápoles, la decadencia se presentó ante nosotros como un planeta que descubrir; comimos en Da Pasqualino, subimos al cielo y bajamos al infierno, nuestra recompensa: un atardecer en el Dell'Ovo que aún me sigue calentando las entrañas; los ojos cerrados en el Plebiscito y más bien guiñados en Bellini, un par de taxis a Via San Cosmo fuori Porta Nolana (por mi culpa) y una resaca en Pompeya

Warhol y compañía, Siena y tú, un pueblecito toscano con Otón y Roro y los Museos Capitolinos

el equipo se reunió en Bolonia y dos días bastaron para atraparme; sabía que no iba a ser la única vez que me resguardaría sotto le Due Torri

el Evento de invierno para los de aquí (sí, ya eramos "de aquí") fue jugar en casa

el mejor balcón de Roma está en Ippocrate 92 y también se suele poner bien una terraza por Giano della Bella

Bruselas, tenía ganas de ver a Hélène y a Andrea en casa después de tantos años

una foto borrosa en Papà non vuole; todos sujetábamos una cerveza y a nosotros sólo nos sujetaba el portal de Xisco y Javi; no teníamos excusa ni nada que celebrar, qué coño nos importaba

un bus con retraso a Florencia; nos dejamos el cuello mirando el Duomo y los pies en los Uffizi; fuimos hasta el Ponte Vecchio esa noche, un espectáculo de fuegos artificiales no puede superar a las luces reflejándose sobre el Arno; ni siquiera un hostal de mala muerte me pudo quitar esa sensación de plenitud

Ex Dogana, Carlo Cartello; me encanta veros bailar y me encanta aún más quien hace el imbécil conmigo en salas vacías

un avión que no cogí por imbécil, última visita a los Aranci y vuelta a casa

nuevo piso, nuevas compañeras; quizá por una vez tomé la decisión adecuada

Testaccio y Matadero con el mejor compañero de museos que se puede tener, sólo cuando nos quedaban un par de cuadros nos dimos cuenta de que eramos parte de la obra; tío, no sé si lo sabes, pero you put the flame on me

"non hai nulla da dimostrare", "i sogni li ruba chi non ce l'ha", "ricordati che sempre sarò pazzo di te", paredes con las que me topé y que me dejaron helado; por enésima vez la Fontana di Trevi de madrugada nos recordaba dónde estabamos y por qué

terrazzo, un autobús perdido y otro cogido, la Casa de Julieta ("¿a que no sabes dónde he vuelto hoy?") cargado con todos los bártulos y un café en el cielo de Verona; gente muy mala alrededor de una mesa, porque si la fiesta acababa pronto mejor de tranquis y estar bien para lo que venía; antes del primer canal de Venecia ya queríamos cerveza y el señor senza glutine su limoncello, pateamos sin mucho rumbo hasta San Marcos, calles y canales estrechos, nos quedamos sin góndola pero no sin ron, ginebra y sus correspondientes aderezos, la guinda: las luces adornando el Gran Canal; Padua, el team ruina había hecho pleno de resacas y no faltó un triturbo en la puerta del Santo, si el freetour era malo eso que nos ahorramos; os quise "al fallo" y me sonrió la suerte

nos vamos a Berlín, no quiero reproches; Cremona 19 se trasladaba para recibir multas, comer kebabs ultrapicantes y acabar de cervezas en un bar de punk; Pedro Saavedra, el cine y hamburguesas ricas

una tarde difícil de olvidar en Santa Marinella, era 15 de marzo y aunque todos llevaramos el bañador, nadie se metió al agua (que parecía del mismísimo Ártico); os ví muy felices y yo, la verdad, también lo fui, un poquito a escondidas

March Madness cumplió con su cita en la capital italiana, beber con el Foro a nuestros pies y el Coliseo asomándose tímido; Gianicolo con vosotros, Capilla Sixtina, el suelo de mi habitación lleno de latas de Barley y el corazón un poco más grande

ay, Amsterdam; ni la peor de las duchas fue capaz de frenarnos, ni nos mataron las bicis a toda hostia; un paseo en barca helados y un poco colocados, Heineken en mano y mudos ante la ciudad de noche, y yo más mudo aún, porque vuestras caras arrojaban más luz y color que los focos del barrio rojo; museos y museos un poco más complicados, tulipanes rosas y queso holandés; tocaba irse a Bruselas de nuevo, un bocadillo que casi nos mata, un freetour de cuatro horas y un cantante que nos hizo aún más cálido el atardecer en el Sablon; Eindhoven, gracias Paul y gracias Monique

mes de abril y aún estás en Nueva York, como dice Cala Vento, yo estudiando; Ostia Lido, Rashõmon (eternas gracias, team techno), domingueo en Circolo, unos bailando y otros buscando reggaeton, lunes en Nur completamente sobrio, pero qué risa; llegó Juane y nos fuimos a patear, nos subimos a la azotea y fuimos por un rato absolutamente libres, con nuestra Peroni en la mano mientras el sol nos abrasaba la cara

otra vez Bolonia, mi Bolonia querida, un autorregalo de cumpleaños; vosotros bailábais en San Giovanni, que se joda la lluvia

mayo ya daba señales de que quedaba poco, pero todos decidimos que teníamos que marcarnos esto a fuego; vuelta a casa, después de todo necesitaba veros; decisiones equivocadas (me hubiera gustado estar en Rimini), me llevasteis de nuevo al Rashõmon y tengo una foto con Xisco que es pura fantasía; la sucesión de Fibonacci en la piel, recuerda que nada es más perfecto, idiota; volvimos a bailar en sitios oscuros hasta las tantas y volvimos a casa con la cara empapada

tocaba estudiar de nuevo con la cabeza en Venus; Bolonia volvió a ser mi refugio y me abrazó con sus soportales cuando más lo necesité

aprobamos (algunos siguen aprobando) y comenzaron las despedidas; lo siento Chio; nos vemos en nada Javi; Pellín, no sabes lo duro que es esto; Xisco y Gómiz mil gracias por vuestro consejo (lo llevo bien dentro); Nuñez, la isla no está tan lejos; Ana, Alba, Lu y Sofi qué raro va a ser el día a día

otra vez cayó el sol sobre lo alto del Aventino, "no puedo vivir sin ti", Peronis y más Peronis, medianoche en Colosseo recogiendo hasta las últimas migas del momento

hoy me toca a mí, e independientemente de la huella que haya dejado, sé que cuando reviva esto podré decir que tengo motivos para acabar esta etapa sonriendo y levantando de una vez la cabeza; y es que Roma es grande, pero me cuesta creer que haya podido caber todo esto (incluídos vosotros)

miles de gracias y de besos a los que se fueron, a los que se quedan, a los que volveré a ver y a los que no, a los que quiero y a los que no tanto, a quien me puso una y otra vez los pies en la tierra: todos tenéis una marca que adjudicaros en este amasijo de huesos

"y ahora hacemos tantas cosas que antes por temor irracional dejamos de lado"

un avión sólo de vuelta,
todos nos preguntamos "¿y ahora qué?"

(3 de julio de 2019, aeropuerto de Fiumicino, Roma, 19:14)

jueves, 28 de febrero de 2019

M i a v i t a.

no sé quién esta gente
y sigo teniendo miedo
sigo dándome asco

una temporada en el infierno
e iluminaciones
los poetas malditos
empiezo a entender por qué moriste
Charles

escupiré en la tumba del
general Aupick
algún día
si eso te hace feliz

iré a verte si me lo pides
con rosas azules
a ver si me entierran contigo

porque el negro es la salida
porque de negro empezamos

ya lo sé mi mentor
que me dejaste algo
que no puedo ver
pero que me tiembla
en las vísceras

agua que brota del subsuelo
agua es lo que necesito
para limpiar toda
esta mierda
que no sé si es real o no

nos vemos en el carnaval
en Berlín o en
su pelo

es lo que más me quema

une saison en enfer
y no sé si sigo despierto
tráeme
tráeme rosas azules a Montparnasse
que si no duermo contigo
ojalá
estés
ahí
si
no
despierto

llueve dentro
no pueden ni los soportales
no puede nada

que se lleven todo este desastre

viernes, 31 de agosto de 2018

Las noches del incendio.

en la época de la inmediatez
del pulso a los minutos
viven seres bajo la roca
que se alimentan de
la sombra que proyecta el segundero
y del calor de tu boca

se perdieron los caminos
que llevaban a Roma
y al revés
se perdió andar y andar
se perdió buscar
y si no encontramos retroceder

a veces quiero despertarme
y pensar que los demonios
que duermen conmigo
son marionetas de una obra
que me invento yo mismo
y dejar de dormir

no sé por dónde quiero ir
pero si el camino es andar
que mis pasos levanten
hasta el sonido
y como sé dónde llegar
habrá merecido cada latido

nos hemos perdido
pero hace tiempo que
hemos compartido puentes
y si quieres te doy la mano
y si no quieres ahí está
que a mí no me lleva la corriente

verano muerto
carita inocente
viento helado
y mucha suerte

a mí no me lleva la corriente

jueves, 23 de agosto de 2018

Drive (5500 rpm)

que oscuridad tan
poco propia de otro

hay algo que quiero decir
que habla y hablan de ti
y parpadeo
creyendo que soy el
rey del mundo
cuando en realidad
tiene y tengo sentido
cuando una espiral de fuego
se mece entre los cristales
que dejaron las pestañas
de nuestra vida

hay algo dentro
de ti y de mí
que me resulta complicado
de entender pero creo
que voy a dejar de investigar
y voy a empezar a preguntar
al reflejo

en la playa de los inocentes
la arena no deja de golpear
y sólo soy yo
el que respira el polvo

vaya con las noches en vela
las escamas de serpiente
que no he conocido peor
veneno que un beso
y el antídoto es peor todavía

ya me conoces
y sabes que no
me conoce nadie
pero había algo dentro de ti
y de mí que me hacía pensar
en lo miserable de cualquier
ser humano que no fueras tú

por eso estamos aquí
conduciendo a ningún lugar
lejos del peligro de encontrarse
como Ryan Gosling
en Drive